PICADURAS DE INSECTOS

La mayoría de las picaduras de insectos son inofensivas, aunque a veces causen molestias. Las picaduras de los aguijones de las abejas, las avispas, los avispones y mordeduras de las hormigas rojas suelen ser dolorosas, mientras que las de mosquito y pulgas causan picazón.

 Los insectos también transmiten enfermedades, así por ejemplo en Estados Unidos, algunos mosquitos trasmiten el virus del Nilo y en otras regiones se puede contraer la malaria.

¿Cómo identificar picaduras y mordeduras de insectos?

Mosquitos

A los mosquitos se les encuentra por lo general cerca del agua (pozas, lagos, piletas para pájaros) y se sienten atraídos por los colores brillantes y por el sudor. Sus picaduras ocasionan una sensación de aguijonazo seguida de un pequeño montículo rojo y que produce comezón, con una diminuta marca de punción en el centro. En general el tipo de veneno, es la propia saliva que tiene sustancias anticoagulantes para facilitar la succión de la sangre

Pulgas

Las picaduras de pulga se identifican usualmente por la presencia de varias protuberancias pequeñas que se agrupan, a menudo en donde la ropa se ajusta mucho al cuerpo (cintura, nalgas). Las pulgas se encuentran comúnmente en pisos y alfombras y es más probable que causen problemas en casas donde hay mascotas. Suelen preferir la piel cubierta de pelos de animales

Chinches

A las chinches se les encuentra usualmente en fisuras en las paredes o en los pisos, hendiduras en muebles y en la ropa de cama. Las picaduras de chinches se caracterizan por protuberancias rojas y que causan comezón (que ocasionalmente presentan una ampolla en la punta); usualmente, hay de 2 a 3 en fila. Es más probable que las picaduras ocurran por la noche. Las chinches son menos activas en clima frío.

Hormigas rojas

Dolor inmediato y sensación de ardor se experimentan con frecuencia después de una mordida seguido de hinchazón y un líquido turbio en el área de la picadura. Las hormigas rojas atacan por lo regular a intrusos y se les encuentra comúnmente en pastizales, praderas, césped y parques.

Abejas y avispas

A estos insectos alados se les encuentra usualmente cerca de flores, arbustos, áreas de picnic o playas. Se produce dolor inmediato y rápida hinchazón después del aguijonazo. Algunos niños presentan reacciones graves, tales como dificultad para respirar y urticaria en todo su cuerpo.

Garrapatas

Se les encuentra en áreas boscosas. Posiblemente se encuentren ocultas sin que se les note en el cabello o en la piel. Cuando intente extraer una garrapata no use fósforos, cigarrillos encendidos ni removedor de esmalte para uñas. Con la ayuda de unas pinzas, tome la garrapata cerca de la cabeza y tire suavemente directo hacia afuera.

¿Qué reacciones producen?

Podemos encontrar 4 tipos de reacciones:

Reacciones locales: signos y síntomas que aparecen en el lugar de la picadura. Generalmente son leves y transitorios. La lesión típica consiste en una zona enrojecida, hinchada y dolorosa de 1 a 5 cm en el lugar de la picadura que evoluciona en minutos y se resuelve en pocas horas (ocasionalmente puede durar uno a dos días).

En el caso de las hormigas de fuego se puede producir una lesión pustulosa en el lugar de la picadura que dura unas 24 horas. Estas pseudopústulas son estériles y hay que advertir al paciente de que no la arranque pues puede infectarse.

Reacciones locales extensas:  dan una reacción local de mayor tamaño (10 cm) y que perdura más en el tiempo. Aparecen en el 10% de los pacientes. Evolucionan en unas 48 horas y se resuelven en 5 a 10 días.

Reacciones sistémicas: pueden ser secundarias a:

• Reacción alérgica sistémica/anafilaxia . No guarda relación con el número de picaduras sino con el grado de sensibilización previa.

 Puede afectar a personas de cualquier edad, pero los adultos sufren reacciones más severas y mayor número de muertes. Los hombres se afectan más que las mujeres. Es más frecuente en pacientes atópicos.
Se debe sospechar una anafilaxia cuando aparece de manera aguda (minutos o pocas horas) un síndrome rápidamente progresivo que afecta a la piel y/o mucosas (urticaria generalizada, prurito, eritema, sofocos, edema de labios úvula o lengua) junto con al menos uno de los siguientes: compromiso respiratorio) y/o circulatorio

• Reacciones sistémicas tóxicas: se producen por efecto directo del veneno o como consecuencia de múltiples picaduras. Son más graves en niños

Pueden cursar con fiebre, náuseas, vómitos, diarrea, cefalea, vértigos, hipotensión, convulsiones, síncope. No deben de confundirse con reacciones alérgicas.

Reacciones tardías: son poco frecuentes. Pueden aparecer a los días o semanas tras la picadura.).

¿Cómo tratamos las picaduras?

• En caso de permanecer el aguijón clavado, se debe de extraer lo antes posible para evitar que siga inoculando veneno. Debe de rasparse cuidadosamente con un objeto romo (tarjeta de crédito, borde romo de un bisturí, etc.). No deben de utilizarse pinzas para evitar apretar el saco del veneno y aumentar la cantidad secretada. Nunca lo retiraremos mediante succión o utilizando las manos.
• En el caso de garrapatas deberemos de extraerlas mediante unas pinzas curva, fina, sin dientes, de tamaño medio colocándolas paralelas a la piel y lo más cerca posible a la misma, tomando la garrapata por la cabeza. Entonces ejerceremos una tracción lenta y constante, sin aplastar el cuerpo ni tirar de las patas o retorcer la garrapata, para que se suelte por sí misma.

• Retirar anillos, pulseras, relojes o cualquier otro objeto que pueda comprimir tras la inflamación.
• Lavado y desinfección de la zona con agua y jabón. Puede ponerse algún antiséptico local preferentemente con agentes que no coloreen. De existir ampollas o vesículas, éstas no deben de romperse.
• Aplicar frío local (hielo envuelto en una tela) durante unos 10 minutos, retirándolo otros 10 minutos y repitiendo el proceso sucesivamente. Esta maniobra permite bajar la inflamación y disminuir la absorción de algunos venenos.
• Reposo y elevación del miembro afectado.
• Si la lesión es muy pruriginosa, las lociones de calamina o amoniaco pueden aliviar. También pueden aplicarse pomadas de corticoide de potencia media o antihistamínicas (con precaución por fotosensibilidad).
• Tratamiento del prurito: administrar antihistamínicos vía oral en caso de prurito intenso.
• Tratamiento del dolor: puede administrarse paracetamol o ibuprofeno.
• Si el paciente es propenso a anafilaxia, recordar llevar adrenalina inyectable

¿Cómo se previenen?

• Evitar el contacto con el agresor:
  • Evitar los lugares donde haya riesgo de artrópodos (ríos, estanques, colmenas, etc.). Evitar caminar descalzo en piscinas o campos. Sacudir la ropa que se haya dejado en el suelo antes de ponerla de nuevo. En merenderos o comidas al aire libre es preferible evitar las bebidas azucaradas y mantener los cubos de basura bien cerrados. Las mascotas deben de estar correctamente tratadas y revisarlas cuando salen al campo.
  • Evitar perfumes y olores intensos.
  • Uso de mosquiteras y ropas amplias de manga larga, de colores claros evitando los colores brillantes, oscuros o de motivos florales. Es mejor meter la camisa por el pantalón y los pantalones bajo los calcetines. Se recomienda impregnar la capa externa de la ropa y mosquiteras con insecticidas (permetrina 0,5%) sola o en combinación con DEET (N-dietil-meta-toluamida) para aumentar su eficacia 2 horas antes de usarla (dejarla secar). Se debe de reimpregnar cada 5 lavados o cada 6 meses. En viajes tropicales se recomienda lavar la ropa con agua caliente y plancharla antes de ponerla.
  • Uso de difusores ambientales de insecticida (aletrina).
  • Conocer el comportamiento de los animales. Generalmente atacan si se sienten amenazados. Evitar levantar piedras con las manos o pies. Si se posa una abeja o avispa permanecer quieto o hacer movimientos leves hasta que se vaya.
• Uso de repelentes:
  • Repelentes naturales derivados de plantas: aceite de eucalipto o citridiol, aceite de citronella. Estos son poco tóxicos y pueden usarse en menores de 2 años sin antecedentes de convulsión pero siempre valorando el riesgo/beneficio.
  • Repelentes químicos: DEET (N-dietil-meta-toluamida), IR-3535 (etil-butil-acetil-aminopropionato), picaridina. Se recomiendan a partir de los 2 años aunque pueden administrarse por debajo de esta edad en bajas concentraciones a excepción de picaridina.
  • Algunos autores recomiendan la ingesta de 75-150 mg de tiamina que al excretarse por el sudor produce un olor desagradable para los dípteros.

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